miércoles, febrero 01, 2006


El domingo por la noche fuí valiente y aguanté. Aguanté las cuatro horas de la XX Entrega de los Premios Goya, como una campeona (vale, hice zapping). No recuerdo un año tan tan aburrido y tan mal conducido.

El primer "shock" me lo llevé al comprobar que el efecto Anne Igartiburu se repetía. Veía bajar a Concha Velasco por las escaleras de mano de Antonio Resines y decía para mis adentros "no puede ser, no, no puede pasar otra vez". ¿Pero dónde están los estilistas de la Gala? ¿Por qué odiaban tanto a Concha? ¿Acaso no hay otro forro que no sea de color blanco? En fin... cuando la buena mujer se pone a presentar tan sumamente mal, se me olvidó lo del vestido. Si no se equivocó 20 veces, no lo hizo ni una. Querida Concha, no fue tu mejor día. Vais a tener suerte que no he encontrado foto completa del primer traje que lució, pero pero pero las cosas siempre pueden ir a peor, y el segundo vestido fue mas precioso todavía. Pensad en un momento en esas alcobas de matrimonio, que tienen unas cortinillas blancas de tela fina y a los lados otras mucho más gruesas de estampados que hacen juego con el edredón y los cojines. Pues ese segundo vestido me recordaba enormemente a eso...


Paco Marsó, ¿alguien le ha visto? ¿Hah vihto a Paco tú?

Según he leído por los periódicos estos dos días, mis comentarios hasta parecerían suaves, porque no han dejado títere con cabeza.

En fín, a lo iba, que hubo un personaje que me encantó. El chico que ayudaba a las señoras y señoritas a bajar por las escaleras del escenario. Sí, ese que iba sonriente, con una coleta. A mí me recordaba a uno de estos que hay en los bares y restaurantes de despedidas de soltera, que acaban sólo con un tanga y la pajarita. Luego, hubo otro que me dejó trastorná (como dirían unos amigos míos), y al que yo cariñosamente llamo Pumuky, que era uno del equipo de la peli de "Habana Blues" (una peli muy guay, por cierto), uno del equipo de la música: pelirrojo de larga y rizada melena, de esos que digo yo que tienen el rizo muy pequeño y se lo peinan a conciencia. Los de la última fila fijo que le tenían localizado.

Discrepo en cuanto a las críticas de la vestimenta de los invitados. Salvo excepciones, por lo general me pareció que todos iban muy bien, hasta Fernando León de Aranoa llevaba un camisa! Eso sí, la proxima vez le diremos a la Coixet que: primero, me gustan más las gafas de montura rosa y segundo, que le dejo las planchas del pelo, que lo llevaba pelín "bufao". Aunque olé por ella y por su película, que se ha llevado cuatro cabezones (eso otra, ¿dónde colocas los premios? ¿encima de la tele? bien pensao, para sostener libros en la estantería son estupendos). Aquí la vemos a ella, con cara de sueño después de 4 interminables horas:



" (pensando) Iros ya a vuestra casa, que mañana m tengo que levantar temprano"

Los premios a Candela Peña y Micaela Nevárez fueron los que más me gustaron. Las dos salen tremendas en "Princesas". Candela Peña tiene un sello inconfundible, no hay ninguna pelicula en la que no me guste como sale, y en ésta, la tristeza y las ganas de encontrar alguien que la quiera hace que uno simpatice con el personaje de Caye. Aunque se haya criticado su vestido Y NO MIRO A NADIE QUE EMPIECE POR S Y ACABE POR Z, JE JE JE, a mí me encantó, y Micaela estaba radiante.



"Dientes, dientes y Goya,Goya, que es lo que les jode"




Aquí unas princesas

Me pareció muy justo el premio a Óscar Jaenada, por su papel el "Camarón", además que como actor me gusta bastante. También me encantó que le dieran un premio a Carmelo Gómez, ataviado con traje de terciopelo y patillas a medio camino entre Curro Jiménez y el reportero del tomate. Además, es un tío que tiene mucho atractivo... aunque claro, no os penséis que me había olvidado de mi J punto D punto Botto, al que ví dos o tres veces entre las butacas.

Un supenso como la copa de un pino le ponía al vestido de Chenoa. Ya he leido que algunos la compararon con Jennifer López, por eso de llevar un vestido ceñido, en plan butifarra, que personalmente creo que le quedaba horroroso. Y es que además, de piernas para abajo tenía unos volantes que me recordaban los trajes de I punto P punto. Querida Chenoa, con lo mona que tú eres, sabiendo que las cámaras te iban a captar por ir de la mano de ese novio actor tan estupendo y tan de buen ver- mucho mejor que Bisbal, ánde va parar!-, debías haber elegido mejor el vestuario.

"El Bola" estaba sentado del premiado Jesús Carroza, por su estreno en el cine con "7 vírgenes" (parecen hermanos) y por más que intentaba mirarle a la cara, a Juan José Ballesta me refiero, los ojos se me iban más al sello del dedo meñique. Ya leí en una entrevista que le hicieron los de "El País Semanal" que a él le gustaban mucho las cosas de oro, y parece ser que cuanto más, mejor (si le llegan a dar el Goya a él y hubiera cogido la estatuilla con la mano donde llevaba el sello, el brazo se le hubiera descolgado dierectamente... brummmm al suelo!!!).

En fin, que espero que también vosotros aportéis con vuestras opiniones, y ahcemos nuestro particular corrillo (riéte tú de la Campos, que... bueno... mejor me callo, pero a veces deberían escurrirse un poco más los sesos para ponerle nombre a un programa, que no vale cualquier cosa...)

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Como el anuncio del capuccino de hace unos años: "...ti merece un premio...". Con lo que me gusta el cine, odio estas galas. Si que has aguantado como una campeona.
Leyendote, como si lo hubiera visto.

Anónimo dijo...

Ains, qué mal que lo hizo Concha Velasco. Qué mal guión, dirección, escenografía, homenajes a los goya...