jueves, agosto 30, 2007

Una de concursos

Hoy debería de hacer referencia al premio "Blog Solidario" que me ha dado Sr. Skyzos, aunque realmente ya veis que no suelo escribir mucho y que tengo muchas cosas pendientes, como por ejemplo poner los enlaces a los blogs que leo, y poner enlaces al Youtube y esas cosas, porque soy bastante nula para esto y como no se siente alguien conmigo para esto, no hay manera. Esto lo digo porque el hecho de que nos os tenga como enlaces no quiere decir que no me gusten vuestros blogs (a los que leo daos por aludidos) y porque mañana o en cuanto pueda daré cuenta de mis premios, aunque este finde tengo visita y no sé cuánto tiempo pasaré en casa.
Dicho esto paso con el tema al que iba, porque hace dos días que quería hablar de lo siguiente...
Hace ya más de dos años me entró el gusanillo de poder ir a algún concurso de televisión, me refiero a los de cultura general. Y entonces empecé a llamar a unos cuantos. Y desde entonces he hecho bastantes castings y también he podido ir a algunos programas, aunque no he tenido casi nada de suerte y sólo en uno he conseguido dinero... De todas formas, desde la primera vez que fui, me encantó la experiencia y no me importa demasiado no ganar (importarme, en realidad, sí me importa, evidentemente, pero el hecho de ir ya me gusta bastante y total, no tengo nada que perder). Tampoco es que sea una cerebrito y muchas veces cuenta los compañeros que te pongan al lado y la dificultad de los temas que salgan, así que nunca se sabe.
Mi primera experiencia televisiva fue el "Números Locos", un concurso que duró poco en antena (3), que presentaba Sobera. Las respuestas a las preguntas eran numericas y ganaba el que más se hubiera acercado a la respuesta. Fue en Barcelona (Sant Just Desvern) y tuve que hacer noche en un hotel, junto con el resto de los concursantes (porque se graban varios programas en un día).





El caso es que en la cena ya fuimos haciendo migas todos los que íbamos (eramos unos 16 o así) y luego nos fuimos a un karaoke a hacer el chorra, quizá para quitarnos la vergüenza para el día siguiente.
Al día siguiente, muy temprano nos llevaron al plató, que, casualidades de la vida, habia sido la Academa de OT de la primera edición (o al menos uno de los edificios donde los chicos vivían) , y aunque estaba todo modificado, todavía quedaban "huellas" de ese paso musical en algunas habitaciones (sala de ensayo, salones de descanso, el comedor...).
Nos maquillaron y nos peinaron muy muy bien (todos nos mirábamos en los espejos) y mientras tanto se iba viendo cómo otros iban grabando. Luego nos enseñaron el plató, hicimos pruebas de sonido, de pulsadores... Concursábamos de cuatro en cuatro y sólo se clasificaba uno, que podía llevarse dinero en función de las preguntas que fuera acertando y de cómo cayera la ruleta que tenía que hacer girar en la segunda fase.
Tengo que decir que Carlos Sobera es un tío muy simpático, enrollado de verdad, se le vá la pinza con las chorradas más que a mí cuando me pongo y cuando le da risa (cuando se ve por la tele) es de verdad, no es nada fingido ni forzado. Y es tal cual sale por la tele, más alto de lo que parece, eso sí.
Estaba muy muy nerviosa, casi no me salía hablar haciendo comentarios, aunque uno de los que concursaba conmigo (que era igualito que el Chuacheneguer, pero en bajito) no paraba de decir cosas y nos partíamos de risa (Sobera incluido). La cosa empezó bien, al menos para mí, iba muy bien. Pero en las dos últimas preguntas pues pinché. Una por despiste total y la otra porque no tenía ni idea (cuántas islas conforman el archipiélago de Japón). Así que casi a punto de clasificarme me fui pa casa. Una pena. Aunque también hubo gente que se clasificó pero que no se llevo nada (la ruleta caia en la mala casilla y a joderse). En fin, era también cuestión de suerte.
Después de comer nos fueron llevando al aeropuerto y ahí se acabó mi primera experiencia televisiva, aunque yo volví encantada, me lo había pasado muy bien.
Posteriormente, he ido a varios más. El que más impresiona es el "¿Quién quiere ser Millonario?", estar en el plató, cuando las luces se bajan y suena la música... En ese, era mucho más dificil salir a concursar, ya que de 10, como mucho salían 2, y sólo se clasificaban los dos más rapidos contestando, y os aseguro que es bastante jodido, por muy rápido que quieras pensar y escribir. No llegué a salir, pero nuevamente me encantó la experiencia (y volver a comprobar que el Sobera se lo toma todo con buen humor). Y el hecho de haber pasado el casting pues también me gustó.
A la tercera ocasión fue la vencida y ya me llevé un pellizco, pero esto lo dejo para otro proximo episodio, que no quier hacerme pesada...
( Y chitón chitón shhh, que ya seguiré contando mis andanzas televisivas y de casting en un futuro)

martes, agosto 07, 2007

Lisboa

Después de pasar tres semanas fuera, de disfrutar de la tranquilidad de la vida de pueblo y de unos días en el país vecino, vuelvo a casa, ante una incertidumbre de futuro laboral que espero se despeje en breve y con el consuelo de poder disfrutar de la playa, aunque sea poco, hasta septiembre.





Este año, por fin, he ido a Lisboa. Y lo digo así, porque es una ciudad bastante cercana y sin embargo, no había ido nunca. Lo primero que debéis de saber, para el que no haya ido nunca y decida hacerlo en coche, es que los lisboetas y creo que los portugueses en general, conducen muy muy mal. Hay que andarse con mucho ojo, es que parece que los intermitentes los tienen de adorno en los coches... Y en general, está muy muy bien de precio, comparado con el resto de los países europeos. Se come muy bien y bien de precio, siempre que no te metas en ningun bar o restaurante concebido para los turistas y son bastante agradables y simpáticos. Sobra decir que el idioma no supone ningún problema, pero acabas un poco cansada de decir obrigado, una palabra demasiado larga para decir gracias. Dos o tres rasgos caracterizan la ciudad: la principal son las calles adoquinadas (prohibido los tacones), la segunda es la ropa tendida por multitud de balcones y ventanas, sea en el barrio que sea, y la tercera es la cantidad de edificios viejos, entremezclados sin ningún problema con los rehabilitados. Esas tres cosas le dan el encanto a una ciudad llena de cuestas, muy fácil de recorrer. Y los tranvías, que son muy chulos. Y cosas canomoris, que hay, sobre todo en los comercios antiguos. Tambíén visité Sintra, a unos 40 minutos en tren de Lisboa y un sitio precioso, precioso de verdad, a pesar de la multitud de turistas.
Lo del mundo comercial es como si estuvieras en España. No sólo por todas las tiendas del grupo Inditex, ni siquiera por Adolfo Domínguez... es que hay un Corte Inglés, con la misma publicidad que aquí. Ves a la Cañizares en la publicidad de los autobuses...





Tengo que agradecerle a Sheperdsen sus recomendaciones, así como poder encontrarnos en la ciudad, cenar y tomarnos una copa en el Barrio Alto. Obrigada!!





Bueno, pues aqui os dejo unas fotos para que os podáis hacer una idea de la ciudad...


Torre de Belém, muy visitada, muy chula


Vista de la Praça do Comercio desde el Castillo de San Jorge, Barrio de Alfama


Sintra, Patrimonio de la Humanidad: vista del Palacio Nacional. Un lugar precioso, mucha vegetación, muchísima...

Sintra: Palacio da Pena. Un lugar escondido entre un inmenso parque, con árboles centenarios, al que se sube en autobús por unas carreteras imposibles de curvas, y ¡con lo mal que conducen!


Tranvía por la zona de la Baixa


Soportales y Arcos de la Praça do Comercio


Casas del Barrio Alto


Praça do Restauradores, con el Elevador de Santa Justa al fondo (justo donde está la bandera en lo alto del elevador hay una cafeteria a la que recomiendo que no subais de noche y con viento, más que nada por el vértigo de subir las escaleras de caracol...)

Quizás cuelgue algunas más, ya veremos.